La curiosa historia de Pedro de Orfila
28 de febrero de 2014
Cosas de la ONU
24 de febrero de 2014
El pasado 5
de febrero, el Comité para los Derechos del Niño de las Naciones Unidas publicó
un Informe en el que mostraba su “preocupación respecto al Vaticano y los casos
de abusos sexuales a menores”. En este Informe coincidente con las líneas de
“tolerancia cero” ya tomadas por la Santa Sede... se aseguraba desconocer el
trabajo que ya ha hecho la Iglesia en los últimos tres años. Trabajo que Mons.
Tomasi -observador permanente de la Santa Sede ante la ONU- acababa de explicar
convenientemente al citado Comité.
Entre otras
cosas, el Informe pide a la Santa Sede que “retire inmediatamente a los
miembros del clero que hayan cometido abusos sexuales a menores, o se tenga la
sospecha de ello, y que los entregue a las autoridades civiles”. Y precisamente
esto es lo que se está haciendo desde hace años.
Para no
andarme por las ramas, voy a ir directamente al grano. Un solo caso -uno solo-
de abuso sexual a menores es mucho. Y un solo caso en la Iglesia es
demasiado... es excesivo. Es un escándalo grande, un pecado grave y un delito
grave.
Tenemos que
reconocer nuestro pecado... y que muchas veces las medidas se han tomado
tarde... y que, en ocasiones, se ha optado por la ocultación... Pero también
hay que reconocer -y no reconocerlo es faltar a la verdad- que la Iglesia
Católica ha pedido perdón y ha tomado medidas. Y el que tenga dudas de cuál es
la postura de la Iglesia, puede releer la Carta a los Católicos de Irlanda, que
Benedicto XVI firmó el 19 de marzo de 2010. El texto de un Papa... más duro y
doloroso... que este que firma ha leído jamás. Donde el Papa emérito decía a
los sacerdotes y religiosos que han abusado de niños: «Habéis traicionado la
confianza depositada en vosotros por jóvenes inocentes y por sus padres. Debéis
responder de ello ante Dios todopoderoso y ante los tribunales debidamente
constituidos. Habéis perdido la estima de la gente de Irlanda y arrojado
vergüenza y deshonor sobre vuestros hermanos sacerdotes o religiosos. Los que
sois sacerdotes habéis violado la santidad del sacramento del Orden, en el que
Cristo mismo se hace presente en nosotros y en nuestras acciones. Además del
inmenso daño causado a las víctimas, se ha hecho un daño enorme a la Iglesia y
a la percepción pública del sacerdocio y de la vida religiosa».
Y
reconociendo nuestro pecado, que es pecado grave... también hay que reconocer
que el 80 % de los abusos se dan en el ámbito familiar, el 15% en el ámbito de
la educación... y sólo el 0,01 % en la Iglesia Católica. Esto no es un consuelo,
pues repito que un 0,01 % es aberrante. Pero ocultar esta realidad... y
pretender transmitir a la opinión pública que este es un problema “sólo de los
curas” es falsear intencionadamente la realidad.
Yo soy
católico. Por la gracia de Dios. Y esto no me convierte en sospechoso o
culpable de nada. Y... “no ser católico” no coloca a nadie “fuera” del
problema. La pederastia es una lacra social.
Nuestra
atención preferente debe centrarse en las víctimas. Para escucharlas, tratar de
comprenderlas, acompañar su dolor, sanar su rencor... Y colaborar con la
Justicia para que el delito... tenga su pena. Sin ambages.
Para más
INRI y en un ejercicio de desvergüenza... el citado Comité invita, por ejemplo,
a la Santa Sede a “reconsiderar su posición sobre el aborto”. Como si la ONU
pudiera decidir... sobre estas cosas. Como si la ONU hubiera olvidado lo que
dice el Preámbulo de la Convención de los Derechos del Niño: «el niño, por su
falta de madurez física y mental, necesita protección y cuidado especiales,
incluso la debida protección legal, tanto antes como después del nacimiento».
San Néstor, primer obispo de Palencia
21 de febrero de 2014
Algunas curiosidades sobre obispos palentinos
14 de febrero de 2014
Thiruthuraipoondi
9 de febrero de 2014
Manos
Unidas, organización a la que tengo especial cariño, se va a empeñar este año
en hacernos creer que UN MUNDO NUEVO es posible. Y que conseguirlo es UN
PROYECTO COMÚN... osea, de todos. Y, rayando la osadía... bendita osadía... nos
dicen que LA CIVILIZACIÓN SE CONSTRUYE EN EL AMOR.
No pienso
gastar ni un minuto en discutirlo. Esto es así... lo sé. Y lo sabemos. Y cuánto
antes pasemos del “convencimiento teórico” a ponernos “manos a la obra”...
mejor para todos. Y me pregunto... “¿por dónde empezamos?” Y me contesto...
“por todos los lados”. Sin olvidar lo cercano, mi casa, mi barrio, mi pueblo,
mi lugar de trabajo... y tratando de llegar a lo más lejano.
Por ejemplo
por Thiruthuraipoondi... localidad que hasta hace unos días no conocía. Y no
tiene nombre de estar en el Cerrato ni en la Ojeda.
Thiruthuraipoondi
es una población agrícola del sur de India -en el distrito de Thiruvarur- donde
viven 600 familias cristianas y 30.000 familias hindúes y musulmanas, con buen
entendimiento interreligioso. Las familias trabajan temporalmente en labores
del campo, como descargadores o elaborando tabaco. También existe desempleo y
trabajos con salarios ínfimos. Y muchas veces las familias envían a sus hijos a
ganar un jornal.
Hay gran
falta de infraestructuras adecuadas como carreteras, agua potable, transporte y
educación... pero por allí andan las Hermanas de Our Lady of Bon Secours.
Estas buenas
monjas se dedican a la educación elemental de los niños de la zona desde 1942.
Su colegio de Saint Joseph es una escuela primaria para niños pobres y
huérfanos. Al tratarse de una población oficialmente clasificada como “muy
desfavorecida”, el Estado subvenciona el salario de los profesores y la comida
de mediodía.
La escuela
actualmente tiene 1.150 alumnos de los que el 45% son de familias dalits
(descastados) y el 0,4% de familias tribales, algunos de los cuales recorren
hasta 7 Km. a pie para llegar al colegio. Hablamos de “los últimos de los
últimos”. Las Hermanas enseñan valores sin distinción de credo y la enseñanza
es gratuita salvo una aportación de 2 euros por admisión, que pagan solamente
los que pueden.
Las Hermanas
quieren construir tres clases nuevas para poder admitir a 150 alumnos más. Van
a aportar el terreno y un dinero que han obtenido de su Congregación y de
colectas en la zona... Les llega para el 40% del coste de la construcción. El
resto... 24.000 € saldrá de la solidaridad de los palentinos.
Todo ello
para beneficio de estos 150 niños y niñas, de todos los alumnos del Colegio, y
de las familias de la zona. Una escuela que permitirá educar a los niños, y así
en el futuro estar preparados para conseguir un trabajo que les permita salir
del círculo de la pobreza.
Os pido de
corazón que hagamos nuestros estos Proyecto de Manos Unidas... y vayamos, poco
a poco, caminando hacia ese MUNDO NUEVO.
Los límites geográficos de la Diócesis de Palencia
7 de febrero de 2014
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